miércoles, 3 de octubre de 2012

DESARROLLAN NUEVAS MANERAS DE PROTEGER LOS AGUACATES

Científicos del Servicio de Investigación Agrícola (ARS) están desarrollando nuevas estrategias para combatir un escarabajo que amenaza a los árboles que producen los aguacates.
La marchitez del laurel es causada por el hongo Raffaelea lauricola, es propagada por el escarabajo de la ambrosia del laurel rojo, el cual es un insecto invasor originario de Asia que se ha extendido a Carolina del Norte, Carolina del Sur, Florida y el Misisipí. La enfermedad mata hasta al 95% de los árboles infectados. Los científicos están preocupados por la extensión de la enfermedad a México y el estado de California, los cuales son áreas principales de producción de aguacates. Otros tipos de árboles de laurel también pueden ser infectados por esta enfermedad.
Paul Kendra y sus colegas en la Estación de Investigación de Horticultura Subtropical perteneciente al ARS en Miami, Florida, están trabajando para minimizar la amenaza. Ellos están buscando cebos químicos para utilización en trampas para capturar los escarabajos. También están tratando árboles en la colección de germoplasma de aguacates del ARS con fungicidas para retardar la propagación de la enfermedad, y están enviando árboles de la colección en Miami a sitios libres de la enfermedad.
Estudios previos demostraron que semejantes a los otros escarabajos que atacan la corteza de árboles, el escarabajo de la ambrosia del laurel rojo "olfatea" los compuestos volátiles. En experimentos de campo, los investigadores compararon el número de escarabajos de la ambrosia del laurel rojo atraídos a cebos a base del aceite de manuka, cebos a base del aceite de phoebe, y pedazos de madera del árbol de lichi y de las tres razas de árboles de aguacate. Las pruebas se realizaron en un área de conservación de la Florida que ha sido infestado por el escarabajo desde el 2007.
En pruebas de laboratorio, los investigadores también realizaron pruebas en las cuales los escarabajos pudieron escoger entre la madera de lichi y la madera de aguacate. Los compuestos emitidos por los dos tipos de madera fueron analizados utilizando la cromatografía de gases y espectrometría de masas.
Los resultados publicados en 'Journal of Chemical Ecology' (Revista de Ecología Química) demostraron que los escarabajos no tuvieron ninguna preferencia fuerte entre las tres razas de aguacate, y que ellos prefieren la madera de lichi. Entre los 29 compuestos detectados en las pruebas, los resultados demostraron la eficacia de tres compuestos en atraer el escarabajo, y la madera de lichi contuvo cantidades grandes de estos tres compuestos.
Investigaciones subsiguientes, con resultados publicados en 'Journal of Economic Entomology' (Revista de Entomología Económica), demostraron que los cebos que contuvieron el aceite de phoebe duraron por 10 a 12 semanas, pero los cebos que contuvieron el aceite de manuka duraron por solamente dos a tres semanas. La nueva información sobre la eficacia de los cebos a base del aceite de manuka podría ser útil para los oficiales de agricultura en la Florida, los cuales usan estos cebos en el monitoreamiento de los escarabajos.
Los oficiales y los productores de aguacate también pueden beneficiarse del descubrimiento sobre la preferencia de los escarabajos para la madera recién cortada. Esta información también indica que los árboles están más vulnerables a los ataques por los escarabajos durante la poda.
Lea más sobre esta investigación en la revista 'Agricultural Research' de octubre del 2012.

viernes, 14 de septiembre de 2012

NUEVAS VARIEDADES DE ARÁNDANOS

El nuevo arbusto que crecen en el jardín de su vecino podría ser exactamente lo que se piensa: una planta ornamental que produce arándanos de color rosa. Estas bayas son bonitas y sabrosas, según científico Mark K. Ehlenfeldt con el Servicio de Investigación Agrícola (ARS).
Como genetista de plantas del ARS en Chatsworth, Nueva Jersey, Ehlenfeldt ha desarrollado, o ha ayudado a desarrollar, una docena de nuevas variedades de arándanos, incluyendo 'Pink Lemonade' ("limonada rosada").
'Pink Lemonade' no es el primer arándano que produce bayas de color rosa, pero probablemente es el más popular de estos tipos de arándanos en EE UU. En 1991, Ehlenfeldt escogió los padres usados para desarrollar 'Pink Lemonade'. Los resultados de pruebas de campo en Nueva Jersey y evaluaciones realizadas por Chad Finn en el ARS en Corvallis, Oregón, llevaron al lanzamiento oficial de este arándano como una selección numerada (ARS 96-138) en el 2005, y en el 2007, con el nombre 'Pink Lemonade'.
Después de pruebas extensas de una nueva variedad de planta, el lanzamiento típicamente involucra el nombramiento, una descripción del pedigrí de la variedad y otra información en una notificación publicada, y luego la distribución de la variedad a uno o más proveedores de plantas de fundación para vender a los viveros comerciales, donde las plantas se propagan para venta al por menor o al por mayor.
Otro arándano notable producido en el programa en Chatsworth es 'Razz', el cual ofrece el sabor de la frambuesa. 'Razz' fue desarrollado en el 1934 por Frederick W. Coville, quien era el primer criador de nuevas variedades de arándanos en el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA por sus siglas en inglés), y fue escogido para pasar por más estudios por investigadores del USDA y de universidades durante la próxima década. Originariamente considerado como demasiado raro, 'Razz' finalmente fue descubierto de nuevo, probado otra vez, y lanzado oficialmente en el 2011.
'Sweetheart' ("cariño") produce bayas firmes y sabrosas de tamaño medio de mediados a fines de junio, y también produce una segunda cosecha más pequeña durante el otoño si el clima es templado. Ehlenfeldt nombró y lanzó 'Sweetheart' en el 2010.
Algunos aficionados del arándano consideran 'Cara's Choice' ("elección de Cara") como el arándano más sabroso ahora disponible. Ehlenfeldt dice que esta planta produce una baya muy dulce y de tamaño medio, con un aroma agradable. Se pueden dejar las bayas en la planta durante varias semanas después de la maduración. Las bayas continúan a azucararse y hacen posible la prolongación de la cosecha.
Arlen D. Draper, quien era el antiguo investigador de arándanos con el USDA, escogió los padres usados para desarrollar 'Cara's Choice'. Evaluaciones realizados por Draper, Ehlenfeldt y otros investigadores llevaron al lanzamiento de 'Cara's Choice' en el 2000.
Lea más sobre estas bayas en la revista 'Agricultural Research' de septiembre del 2012 y también en línea en www.ars.usda.gov/Ehlenfeldt.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

LOS ECOSISTEMAS MANIPULADOS POR EL HOMBRE TIENEN UN MAYOR RIESGO DE PLAGAS

El impacto de algunas epidemias, como la del mildiu de la patata en Europa a mediados del siglo XIX  o la de la grafiosis del olmo en el último tercio del siglo XX, han tenido efectos sanitarios, ecológicos, socioeconómicos y políticos mucho mayores, comparables a las de las enfermedades humanas y de animales más devastadoras.
Una de las cuestiones más estudiadas por los expertos es la razón por la que los ataques de las plagas y enfermedades son en general más graves en los ecosistemas agrícolas en comparación con los silvestres.
Un equipo de investigadores del Centro de Biotecnología y Genómica de Plantas  de la Universidad Politécnica de Madrid (CBGP-UPM / INIA) y del Instituto de Ecología  de la Universidad Nacional Autónoma de México, liderado por Fernando García-Arenal, se ha propuesto averiguar las razones que explican este fenómeno, buscando evidencias epidemiológicas para algunas de las hipótesis que se manejan en la comunidad científica.
Entre las teorías que se manejan en el estudio, publicado recientemente en PLoS Pathogens, destacan las que hacen referencia a la reducción de la diversidad de especies del hábitat y de la diversidad genética de la planta huésped en los agroecosistemas, junto al aumento de su densidad.
La intervención humana está asociada a una menor diversidad de especies del hábitat.

El caso del pimiento silvestre
El primer paso para analizar todas estas teorías fue seleccionar el vegetal con el que se iba a realizar este trabajo, un factor muy importante por la dificultad para obtener datos de una misma especie huésped en ecosistemas silvestres y agrícolas.
Para superar este obstáculo, los investigadores aprovecharon que la domesticación de diversas especies de plantas silvestres de uso humano se está produciendo en Mesoamérica en la actualidad. Como huésped focal del trabajo escogieron el pimiento silvestre o chiltepín (Capsicumannuumvar glabriusculum), antecesor silvestre del pimiento cultivado.
El chiltepín crece en hábitats agrícolas y silvestres, y sus plantas muestran síntomas de enfermedades virales en todos los hábitats, por lo que es idóneo para analizar la relación entre los cambios ecológicos causados por la actividad humana y la emergencia de enfermedades.
Durante tres años, los expertos estudiaron poblaciones de chiltepín de distintas regiones de México en hábitats con desigual nivel de intervención humana y estimaron la incidencia de infección por virus, la incidencia de plantas con síntomas, la diversidad de especies del hábitat, así como la diversidad genética de la población de chiltepín y su densidad.
“El análisis de los datos demostró que cuanto mayor es el nivel de intervención humana, mayor es la incidencia de infección viral y de plantas sintomáticas, es decir, mayor es el riesgo de enfermedad”, explica García-Arenal.
Además, la intervención humana está asociada a una menor diversidad de especies del hábitat, una menor diversidad genética y un aumento de la densidad de plantas de la misma especie, todos ellos factores que incrementan el riesgo de enfermedades en la población vegetal.
El trabajo, financiado por la Fundación BBVA, el Plan Nacional de I+D+i, España, y el Instituto de Ecología, UNAM (México), también tiene un interés particular en el contexto del problema que representa la disminución actual de la diversidad de los ecosistemas de todo el mundo debida, entre otros factores, a actividades humanas.
“La disminución de la biodiversidad se asocia en general con la extinción de especies, con el agotamiento de los recursos naturales y con un empobrecimiento de los servicios que prestan los ecosistemas.
“Otro efecto principal de la pérdida de biodiversidad es que favorece la emergencia de las enfermedades de las plantas, un aspecto del que es menos consciente la sociedad y que también es cada vez  más evidente en el caso de enfermedades de humanos o de animales. Por tanto, los resultados no son sólo relevantes para entender las interacciones planta-virus, sino que pueden tener una aplicación general para comprender la emergencia de las enfermedades infecciosas”, asegura el investigador del CBGP-UPM_INIA.

Referencia bibliográfica:
Israel Pagán, Pablo González-Jara, Alejandra Moreno-Letelier, Manuel Rodelo-Urrego, Aurora Fraile, Daniel Piñero, Fernando García-Arenal. "Effect of Biodiversity Changes in Disease Risk: Exploring Disease Emergence in a Plant-Virus System". PLoS Pathogens julio de 2012
Fuente: UPM

martes, 4 de septiembre de 2012

LA INVESTIGACIÓN SOBRE VARIEDADES TRADICIONALES DE OLIVO DA LUGAR A PROYECTOS DE I+D+I

Las variedades tradicionales de olivo en el Sur de la provincia de Salamanca y el Norte de Cáceres producen un aceite característico por su sabor especial y por su mayor contenido en ácidos grasos esenciales, especialmente el ácido oleico, y en sustancias antioxidantes. Para aprovechar este potencial, la empresa Soleae promueve proyectos de I+D+i para la recuperación, conocimiento y promoción del aceite de oliva generado a partir de estas variedades locales.

Soleae es un negocio afincado en Herguijuela de la Sierra, un pequeño municipio de la provincia de Salamanca ubicado en el Parque Natural de las Batuecas-Sierra de Francia. Esta empresa nació como un pasatiempo para sus creadores, María Hernández, licenciada en Biología, y Jesús Ángel Blanco, agricultor, que llegaron a la zona por motivos laborales y decidieron adquirir una tierra con 60 olivos. La variedad de los olivos de la parcela, denominada Manzanilla Cacereña, es muy diferente de las variedades habituales de aceituna comercial, y al preparar aceite con su primera cosecha estos dos emprendedores notaron sus características especiales e intuyeron el potencial de este aceite en el mercado especializado.
La variedad Manzanilla Cacereña está adaptada a los factores ambientales del Sur de Salamanca y el Norte de Cáceres, clima de montaña y suelos pobres en nutrientes y muy ácidos. Su principal inconveniente es el bajo rendimiento graso, que provoca que por cada kilogramo de aceituna se obtenga sólo la tercera parte del aceite que se obtiene a partir de variedades más comerciales, como Hojiblanca o Picual. La otra variedad con la que cuentan, aunque menos representada en los cultivos, es la Ocal, también muy adaptada a las peculiaridades de la zona y resistente a posibles enfermedades, que se cultivaba antes que la Manzanilla y que tiene un mayor rendimiento en la producción de aceite. Sin embargo, la variedad Ocal hoy en día está muy poco representada en la zona, quedando pocos árboles y en muy mal estado.

Los aceites procedentes de estas dos variedades se diferencian de los aceites más comúnmente comercializados en el sabor, pero también en su composición. Ambas variedades producen un aceite con un contenido en el ácido graso monoinsaturado oleico superior al aceite comercial, con entre un 78 y un 80% en la Manzanilla y un 70% en la Ocal, mientras que la Arbequina, variedad común en el aceite de supermercado, se queda en el 60%. Además contienen sustancias antioxidantes en alta concentración, también superior al contenido en los aceites comerciales.

Los componentes de Soleae se definen ante todo como agricultores, pero ello no impide que promuevan proyectos de I+D+i. Uno de ellos es el de impulsar el estudio de los olivos de Ocal, obteniendo un aceite monovarietal, es decir, de una única variedad, que permita un estudio en profundidad de sus características organolépticas y de su composición, ya que estas aceitunas se suelen mezclar con la Manzanilla para producir un aceite mixto, llamado también coupage.

Conocimiento

En la zona de la Sierra de Francia, especialmente en el término municipal de Sotoserrano, el cultivo de olivar lleva 10 años remontando, con unas 40 hectáreas de nuevos cultivos de la variedad Hojiblanca. Sin embargo, Soleae pretende impulsar el conocimiento de las variedades locales de olivo, en especial de Ocal, de modo que los nuevos agricultores puedan decidir si desean utilizar esta variedad en lugar de otras menos adaptadas y más extendidas en el mercado. Esto podría suponer una ventaja para el agricultor, tanto desde el punto de vista del cultivo, más sencillo con variedades más aptas para la zona, como comercial, ya que la Ocal es una variedad única que da un aceite con características diferentes al producido en otras regiones de España, y puede ser muy apreciado en hostelería. María Hernández afirma que "en el mercado de hoy en día la forma de diferenciarse es con este tipo de cosas". Para ello la empresa puso en marcha el proyecto de recuperación de la variedad Ocal, ya que los pocos olivos que quedan en las parcelas son muy antiguos y se encuentran en mal estado.

El proyecto piloto, para el que contaron con el apoyo del Ayuntamiento de Herguijuela de la Sierra, que cedió una parcela, consistió en el estaquillado de varios olivos Ocal, con el objetivo de obtener plantas jóvenes. Esta fase no ha dado el resultado deseado, probablemente por problemas con el control de la humedad, por lo que actualmente se están buscando colaboraciones con una facultad, escuela o vivero públicos o privados con experiencia en la propagación vegetativa, que pueda producir olivos jóvenes de forma profesional.

Como el momento ideal para comenzar con la propagación es el invierno, actualmente tratan de impulsar el proyecto, para poder iniciarlo a mediados de otoño. Los plazos son muy lentos (tres meses de enraizado, dos años de adaptación en maceta y cinco años desde el transplante al terreno hasta que se obtiene fruto), por lo que un olivo puede tardar más de siete años en ser productivo.
Fuente: PAD/DICYT

martes, 28 de agosto de 2012

UN GEN ABRE NUEVAS POSIBILIDADES DE MEJORA GENÉTICA VEGETAL

La investigación, publicada en la revista Science, identifica un gen FANCM, encargado de codificar la información para la proteína responsable de limitar la formación de sobrecruzamientos (intercambios recíprocos de información entre los cromosomas paterno y materno en la primera división celular).
Esa proteína es una helicasa que desempeña un papel "fundamental" en la replicación correcta del material hereditario, y por tanto en la estabilidad del genoma, tanto en humanos como en levaduras.
Según los investigadores, en la especie humana, las mutaciones que afectan a los genes FANCM están relacionadas con la anemia de Fanconi. En el mutante fancm de la especie vegetal modelo Arabidopsis thaliana, "el número de sobrecruzamientos está incrementado respecto al observado en plantas normales y esos sobrecruzamientos extra son generados a través de una ruta diferente a la habitual en plantas normales", indican.

Manipulación "prometedora"
El descubrimiento de que la proteína FANCM puede limitar el nivel máximo de sobrecruzamientos implica que su manipulación puede ser una herramienta "muy prometedora" en procesos de mejora genética vegetal. Ejemplo de ello son las gramíneas, cuyos sobrecruzamientos están mayoritariamente restringidos a las regiones cercanas a los extremos de los cromosomas. En ellas, la posibilidad de conseguir que tengan lugar en regiones cercanas a los centrómeros permitiría generar nuevas combinaciones genéticas, que constituirían el sustrato para futuros programas de selección en especies de interés agronómico.
El mantenimiento del número cromosómico en las generaciones de una determinada especie con reproducción sexual se produce mediante la división celular especializada denominada meiosis. Las células resultantes de esta división (gametos) reciben la mitad de la constitución cromosómica de la célula germinal originaria. Posteriormente, la fusión de un gameto masculino y otro femenino restaura la constitución cromosómica propia de la especie.
La reducción del número cromosómico es consecuencia de la existencia de dos rondas de división celular entre las que no hay replicación cromosómica. Para asegurar la reducción del número cromosómico, los cromosomas de origen paterno y materno intercambian información de forma recíproca en la primera división meiótica.
Este intercambio es el denominado sobrecruzamiento y da origen a nuevas combinaciones genéticas que serán transmitidas a la descendencia. En las células meióticas existe un control "muy férreo" sobre el número y la distribución de sobrecruzamientos, con el objeto de asegurar la reducción correcta del número cromosómico.

REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA:
Wayne Crismani, Chloé Girard, Nicole Froger, Mónica Pradillo, Juan Luis Santos, Liudmila Chelysheva, Gregory P. Copenhaver, Christine Horlow, Raphaël Mercier "FANCM limits meiotic crossovers" Science 336(6088): 1588-1590. DOI: 10.1126/science.1220381, 22 de junio de 2012.

martes, 17 de julio de 2012

IDENTIFICAN A LOS PROGENITORES DE LA UVA TEMPRANILLO

Investigadores del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino-ICVV (Gobierno de La Rioja, CSIC, Universidad de La Rioja) y del Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA) han identificado los progenitores de la variedad de uva Tempranillo, la uva tinta más extendida en España con un 20% de la superficie total de viñedo.
El análisis de parentesco ha permitido identificar las variedades Albillo Mayor y Benedicto como los padres del Tempranillo. El Albillo Mayor –denominado Turruntés en La Rioja– es una variedad muy conocida, que se cultiva en el centro de la Península Ibérica. Por el contrario, la variedad Benedicto casi no se cultiva ahora, solo queda de forma residual en Aragón, y carece de referencias históricas claras en la literatura vitícola española.
Los datos históricos y genéticos reunidos en esta investigación que publicará en julio American Journal of Enology and Viticulture permiten señalar que la variedad Tempranillo podría haber nacido en el último milenio probablemente en el entorno del valle del Ebro.
El Tempranillo se utiliza para la producción de vino tinto y en la actualidad está extendido en muchas regiones vinícolas de todo el mundo. Gracias a esta investigación se ha identificado por primera vez la genealogía de una de las grandes variedades de uva española en superficie y valor comercial. Previamente se había encontrado el origen genético de otras variedades como Cabernet-Sauvignon (1997) o Merlot (2009).

Estudios de ADN en la uva
En el trabajo se ha utilizado tanto el análisis de ADN como datos morfológicos e históricos que permitieran caracterizar las relaciones genéticas del Tempranillo, identificando a sus progenitores y también a sus descendientes.  
El equipo del ICVV-La Rioja ha realizado el análisis de determinados marcadores de ADN significativos en la colección de variedades de vid del IMIDRA (compuesta por unos 3.400 ejemplares de vid), cuyos investigadores también han realizado el estudio morfológico e histórico de la investigación.
La investigación ha incorporado también una búsqueda de variedades derivadas del Tempranillo. Partiendo de una base de datos que contiene la mayor parte de las variedades españolas sólo se identificó una, el Coloraíllo, como un posible descendiente del Tempranillo y de la Moravia Dulce (variedad también conocida como Marufo o Brujidera). En este caso se ha identificado al Tempranillo como el progenitor masculino. Además, para cada uno de los padres del Tempranillo se han identificado otras variedades españolas relacionadas: Albillo Mayor está relacionado con Castellana Blanca y Benedicto con Benedicto Falso de Aragón.
El estudio contribuye a ilustrar la necesidad de preservar variedades antiguas, especialmente aquellas que ya no se cultivan, como se ha hecho en El Encín, instalación dependiente del IMIDRA que gestiona la colección nacional de variedades de vid, y en otros repositorios de todo el mundo.
Este hallazgo permitirá obtener nuevas variedades mejor adaptadas al entorno climático o geográfico; o con mejores características vitícolas
La identificación de los padres del Tempranillo permite en primer lugar ratificar científicamente el origen autóctono de esta variedad. Además esta información puede servir para obtener nuevas variedades relacionadas que se adapten adecuadamente a nuevos entornos climáticos y geográficos, o que ofrezcan nuevas o mejores características de interés vitícola y enológico.

La identificación, paso a paso
 El proceso para llegar a identificar los ascendientes de una variedad de vid es "complicado", debido sobre todo a la edad de muchas de ellas, que se miden en cientos de años de cultivo. En muchos casos no es posible un hallazgo como el que aquí se presenta, simplemente porque los progenitores han desaparecido. En caso de que existan, es necesario llevar a cabo, por un lado, un estudio de ADN y, por otro, un estudio histórico. Ambos se deben complementar en lo posible con estudios de la morfología de cada variedad.
Para el análisis de ADN se toman muestras (normalmente de hoja) de las distintas variedades a evaluar, se extrae su ADN y se analiza en unos puntos concretos (marcadores) que permiten establecer la posible existencia de relaciones de parentesco entre las variedades. Según los investigadores, cuantos más marcadores se utilicen, más fiable serán los resultados del análisis de parentesco.
El estudio histórico, ayudado por el morfológico, sirve para tratar de determinar el origen temporal de las variedades implicadas, y sus lugares de cultivo en tiempos remotos, que pueden no coincidir con los actuales.
Los investigadores Javier Ibáñez (ICVV), Gregorio Muñoz-Organero (IMIDRA), L. Hasna Zinelabidine (ICVV), M. Teresa de Andrés (IMIDRA), Félix Cabello (IMIDRA) y José Miguel Martínez-Zapater (ICVV) han participado en el trabajo.
Fuente: Universidad de La Rioja

jueves, 5 de julio de 2012

LOS TOMATES ECOLÓGICOS TIENEN MÁS ANTIOXIDANTES QUE LOS DE CULTIVO TRADICIONAL

El Grupo de Investigación en Antioxidantes Naturales de la Universidad de Barcelona (UB), que dirige Rosa M. Lamuela, señala que durante el procesado de los ketchups y de los zumos, los polifenoles (antioxidantes naturales de origen vegetal) disminuyen, por lo tanto, "es necesario comprobar que el origen de las diferencias observadas en los estudios anteriores estaba en los tomates y no en la tecnología utilizada en su procesado industrial", apunta Lamuela.
Los polifenoles tienen un gran interés nutricional ya que su consumo se ha asociado a la prevención de enfermedades cardiovasculares, degenerativas y cáncer. Para este estudio, que se ha publicado en Journal of Agricultural and Food Chemistry, el equipo ha utilizado la variedad de tomate Daniela y ha determinado su perfil fenólico (moléculas orgánicas que se encuentran de manera natural en muchos vegetales y que tienen un efecto beneficioso para la salud humana) mediante cromatografía líquida acoplada a espectrometría de masas. Gracias a este método, el grupo de la UB ha podido identificar 34 compuestos fenólicos diferentes en los tomates.
"La ventaja de tomar los polifenoles en los alimentos naturales es que el alimento contiene una gran variedad de estas moléculas y entre ellas se potencian", explica la investigadora quien añade que esto sería más beneficioso para la salud que la administración de componentes fenólicos aislados en forma de suplemento. Como los tomates también tienen licopenos (pigmento vegetal que aporta el color rojo) y otros carotenos, y vitamina C, "son como un paquete de compuestos beneficiosos", manifiesta Lamuela.
¿Cultivos ecológicos o tradicionales?
Las diferencias observadas entre los tomates ecológicos y los convencionales se deben al abono utilizado. "En el caso de la agricultura ecológica no se pueden añadir abonos nitrogenados, lo que implica que las plantas tengan que crear sus propios mecanismos de defensa y, de este modo, aumentan todos los antioxidantes", subraya la Anna Vallverdú Queralt, primera firmante del artículo e investigadora de la UB.
"La planta, cuanto más estrés tiene, más polifenoles genera", indica Lamuela. Numerosas investigaciones científicas indican que el consumo de estos antioxidantes es saludable, pero las investigadoras aseguran que todavía faltan más estudios de evidencia clínica para poder decir que realmente los productos ecológicos son mejores para la salud que los convencionales. El gran reto ahora para Lamuela sería poder realizar un estudio en humanos comparando consumidores de tomates ecológicos con consumidores de tomates convencionales.
En este estudio también han participado los investigadores Olga Jáuregui, de los Centros Científicos y Tecnológicos de la UB (CCiTUB), y Alexander Medina Remón, que junto con Rosa M. Lamuela y Anna Vallverdú Queralt, forman parte del Departamento de Nutrición y Bromatología de la UB, de la Red de Referencia en Tecnología de Alimentos de la Generalitat de Cataluña (XaRTA) y del Instituto de Investigación en Nutrición y Seguridad Alimentaria (INSA-UB). El grupo de investigación también está asociado a las redes CIBER de Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBERobn) y RETICS, del Instituto de Salud Carlos III.
El gazpacho comercial es saludable
El mismo grupo de investigación, experto en antioxidantes naturales, ha publicado este año otro estudio en el que se analiza la estabilidad de los carotenos y de los polifenoles en gazpachos comerciales conservados en nevera.
En este trabajo, también publicado en el Journal of Agricultural and Food Chemistry, se demuestra que la degradación de estos compuestos no es significativa durante el tiempo de conservación del gazpacho en nevera (tres meses). Así pues, los gazpachos comerciales también son una buena fuente de productos saludables.
"En el gazpacho no solo tienes los polifenoles del tomate; además, hay otros polifenoles que provienen de la cebolla, el ajo, etc. Por eso, es un producto todavía más complejo con respecto a los compuestos fenólicos", afirma Rosa M. Lamuela, de la UB. En esta investigación han colaborado Sara Arranz, del Hospital Clínic (UB-IDIBAPS), e Isidre Casals Ribes, de los CCiTUB.
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Referencia bibliográfica:
Vallverdú-Queralt, A.; Jáuregui, O.; Medina-Remón, A.; Lamuela-Raventós, R. M. "Evaluation of a method to characterize the phenolic profile of organic and conventional tomatoes" Journal of Agricultural and Food Chemistry, abril de 2012, 4, 60(13), 3373-3380.
Fuente: Universidad de Barcelona