Los resultados de las investigaciones realizadas
por el fisiólogo de plantas Lewis
Ziska, quien trabaja con el Servicio de
Investigación Agrícola (ARS) del Departamento
de Agricultura de EE.UU. (USDA por sus siglas en inglés) han sido
publicados en la revista científica 'PLOS ONE'.
Estos hallazgos proyectan cambios en la producción de cultivos como resultado
de aumentos en la temperatura del aire debido al cambio climático.
En el estudio publicado, los
investigadores observaron que uno de los efectos de aumentos en la temperatura
del aire podría ser un aumento correspondiente en las poblaciones de insectos
plagas, malas hierbas y hongos como resultado de las temperaturas más cálidas
durante el invierno. Esto podría llevar a la necesidad de aumentos en el uso de
pesticidas por los agricultores para controlar estas plagas y mantener los
niveles de producción del cultivo de soja.
"Uno de nuestros desafíos más
críticos es encontrar maneras de mantener y aumentar la producción de cultivos
durante el cambio climático", dijo Chavonda
Jacobs-Young, quien es administradora del ARS. "Estos estudios
destacan la importancia de realizar investigaciones que nos ayudan a
enfrentarse a estos desafíos y facilitar el desarrollo de opciones económicas
para la producción sostenible de alimento, pienso y fibra".
En las regiones templadas, la distribución
y supervivencia de los insectos plagas a menudo es detenida por las
temperaturas bajas durante el invierno. Ziska, quien trabaja en el Laboratorio
de Sistemas de Cultivos y Cambio Climático Global perteneciente al ARS en
Beltsville, Maryland, examinó las aplicaciones medias de pesticidas desde el
1999 para los cultivos comerciales de soya en un transecto longitudinal de 1.300 millas desde
Minnesota hasta Luisiana. Las temperaturas mínimas diarias en el área del
estudio variaron de 20 grados bajo cero Fahrenheit a 23 grados Fahrenheit.
Aunque los rendimientos de soja por acre
no variaron por estado, los aumentos en las aplicaciones totales de pesticidas
fueron correlacionadas positivamente con aumentos en las temperaturas mínimas
durante el invierno. Esto sugiere que aumentos en las temperaturas mínimas
podrían llevar a aumentos en el uso de pesticidas.
Ziska determinó que del 1977 al final del
2013, las temperaturas mínimas durante el invierno fueron aumentadas por todo
el transecto, aunque la tasa de aumento fue más grande en los estados norteños
tales como Minnesota comparados con los estados sureños tales como Luisiana.
Esta observación es coherente con las proyecciones del Panel Intergubernamental de Cambio Climático
sobre la temperatura y la latitud.
Ziska usó estos hallazgos para proyectar
el uso de pesticidas en el futuro, y determinó que si estas tendencias
continúan, el uso de pesticidas en el cultivo de soya en las varias regiones
también podría cambiar, con más uso de herbicidas en los estados norteños y más
uso de insecticidas y fungicidas en los estados sureños. En total, según Ziska,
estos hallazgos indican que aumentos en las aplicaciones de pesticidas podrían
proveer una manera de mantener la producción de la soya en respuesta a los
aumentos posibles en las plagas asociadas con aumentos en las temperaturas
mínimas diarias y el cambio climático.